viernes, 1 de abril de 2016

¿Realmente estamos haciendo lo correcto con la detección y selección de talento?

Me surge la duda de cuantas personas deciden comprar un auto solo porque el brochure o folleto del mismo esta bonito. Me imagino que lo normal es primero preseleccionar los modelos que cumplen con nuestros requerimientos (auto, camioneta, minivan, subcompacto, monovolumen, etc); posteriormente los modelos que nos gustan del nicho que seleccionamos y después viene lo bueno: verlos en vivo, analizar sus prestaciones, desempeño, estadísticas, costos, opiniones técnicas de profesionales, hacer la prueba de manejo y preguntar y preguntar y seguir preguntando. Entre más información mejor decisión. Si esto lo hacemos para comprar un simple automóvil (no dejo de restarle importancia al tipo de inversión de este tipo de bienes) no me puedo imaginar lo que deberíamos de invertir de tiempo para seleccionar a una persona que se integrara a nuestro equipo de trabajo y que, dependiendo del nivel jerarquice dentro de la organización, será el directamente responsable de la toma de decisiones criticas para un proceso o función.


 
No logro entender los procesos modernos que tienden a simplificar la información y resumirla a búsquedas de un par de hojas -por la gran cantidad de currículos que debo de revisar- , vistosas, atractivas -en la forma- y "modernas". Al final del día en la búsqueda de este critico recurso -el talento- lo realmente importante es la sustancia. No estoy en contra de la forma, es de alguna manera importante, pero no es el fin ni el objetivo, así de fácil.  Lo que si he llegado a comprobar -al menos en el caso mexicano- es que el proceso actual no esta cumpliendo las expectativas, es absurdo y anacrónico, no resuelve la problemática y por el contrario genera cada vez mas fallas, carencias, errores en la operación y sobrecostos e impactos financieros para las empresas.
En estos últimos años que me he dedicado a la consultoría orientado al desarrollo de soluciones integrales para la manufactura y la cadena de suministro, a través de los múltiples análisis -o assesments- en diversas empresas de variadas industrias, he podido constatar que una de las principales causas raíz de los problemas críticos de las empresas, es la real falta de talento adecuado dentro de los equipos de trabajo de las diferentes funciones. En algunos casos es impresionante -y alarmante- la falta de habilidades y competencias gerenciales en los diversos niveles de responsabilidad de las organizaciones.
 
Es también impresionante la falta de conocimiento y dominio de los conceptos en su fase de aplicación. A veces la teoría mas o menos se maneja pero a la hora de aplicarla en soluciones reales que generen valor dentro de la organización, la realidad muerde. Se que gracias a eso tengo trabajo, pero me gustaría más tener otra orientación que la de tener que entrar de emergencia para evitar una catástrofe o por fin lograr que una empresa sea rentable. Estoy convencido que el talento existe, el potencial también, es cuestión de poner las piezas correctas en el lugar correcto y eso si, mucho trabajo, pero de que se puede se puede.
 
Si ya se, a mis 52 años estoy "fuera de lugar", hoy la tecnología es otra -interesante sería analizar quien diseño y desarrollo esta tecnología- y hoy la forma cuenta mucho y es importante porque vende..................ciertamente. Sin embargo, en cuestión de talento para las organizaciones, lo importante sigue siendo la sustancia, esta es la que provee las soluciones requeridas. Por otra parte y como dicen en mi pueblo, mas sabe el diablo por viejo, que por diablo¡¡¡¡¡¡¡.